DESATINE

Mala mano: Una perra me apestó el pelo


Se llamaba Yasmín. Maldigo el día en que cruzó mi camino. En busca de un corte desesperado, me recibió de una manera atosigante. Fuí prevenida desde un principio, algo altanera de por sí, sin embargo, tras unos minutos empecé a sentirme mal conmigo misma por mi arrogancia, comencé a respirar profundo, escucharla y mirar su estridente sonrisa. Como soy algo elevada, me elevé, obviamente, y, cuando alcé mi cabeza fue demasiado tarde para evitar el desastre.

Mi pelo ya no es el mismo de antes, y no es un capricho. Por fin comprobé que la frase que dice que tal persona tiene "mala mano", es cierta. Fokin Shit.

-"¿Sí quedó contenta?"

Salí despavorida a intentar arreglar el caos frente a mi propio espejo. Como siempre, lo supe disimular, pero por dentro sé que mi pelo ya no es el mismo.

En este momento tengo tres opciones: esperar a que crezca, hacerme otro corte o raparme la cabeza y empezar de cero. Vamos a ver por cuál opción me decido.
Lo único que sé es que si algún día vuelvo a ver a la susodicha esta, se las cobró de frente. Y que lo sepa todo el mundo. Ah bueno sería hacerle el Shampoo... (ahí habló, como siempre, mi subconsciente)